- Cansada de que no le creyeran el abuso del que era víctima, la niña tuvo que grabar con su celular el abuso para que los adultos actuaran.
Por Lau Alvarez //news.culturacolectiva.com
Ya estaba cansada de que nadie le creyera. Fueron meses de abuso y cuando decidió contarlo, nadie creyó en su palabra. Entonces, esta niña de tan sólo once años, tomó su celular y decidió actuar para que su martirio parara. Y es que durante cinco meses, el sacerdote Michele Mottola, de la parroquia de Trentola Ducenta, en Italia, abusó sexualmente de esta menor quien tuvo que grabar con su teléfono móvil el abuso sexual que sufría para que su denuncia fuera escuchada.
¿Cómo que nadie le creía?
Así como lo lees. La menor de once años había denunciado en múltiples ocasiones lo que estaba sucediendo con ella y con el sacerdote Mottola, quien le decía cada que tenían algún encuentro, que era “sólo un juego, no hacemos nada malo”. Incluso, se sabe que existen mensajes y un diario escrito por la niña en donde narra todo lo que le hacía este cura en Italia.
Después de que ella se grabó y mostró a sus padres lo que estaba pasando, ellos reunieron las pruebas y acudieron con las autoridades eclesiásticas encabezadas por el obispo Angelo Spinillo, quien suspendió a Mottola y le prohibió no sólo celebrar misas sino también tener contacto con los fieles.
‘Soy culpable, me disculpo’
De acuerdo a medios locales, luego de la suspensión por parte de las autoridades de la iglesia, Mottola fue investigado por la Fiscalía del Norte de Nápoles y fue arrestado tras confesar su delito. “Soy culpable, me disculpo con la familia de la niña”, dijo cinco días después de haber sido detenido.
Según los testimonios de la mamá de la menor, el sacerdote se había ganado la confianza de la familia con visitas frecuentes y con algunos regalos. De acuerdo a un programa de televisión italiano, entre las pruebas que se recabaron por parte de los familiares de la niña, hay cartas que el sacerdote le escribía a la niña en donde le decía: “no tienes que contar todo porque la gente va a pensar mal de nosotros”.